Pero las tradiciones y costumbres mueren en el reloj de arena, un día duermen en la cima de los granos de arena, para al minuto siguiente morir ahogada bajo el peso del tiempo. La Luna un día perdió el apoyo de las estrellas, y cedió bajo el poder de estas. Las estrellas fueron a devolver el manto al Sol y sus hermanos, pero estos rechazaron la obligación de extenderlo todas las mañanas y cambiarlo todas las noches, trabajo que antes hacia la luna. Las estrellas no sabían que hacer, y el Sol no iba a cambiar de parecer. Fue en ese momento que los atardeceres saltaron levantaron la mano sobre las cabezas de todos y sugirieron, airadamente, que volviera la Luna, pero prometiera devolver el manto a tiempo, excepto en invierno, que los días son más cortos y al sol le cuesta mas escapar de las sabanas del sueño. La Luna acepto, y el Sol contento recibió el cielo.
Según entiendo, la Luna vuelve a tratar de tomar el manto cada cierto tiempo, pero el Sol explica a sus hermanos que es natural, porque no es tan inteligente y necesita el consejo de las estrellas para saber que hacer. Y cuando estas duermen, se impulsa al conflicto. El Sol piensa que no hay nada que hacer, así son las cosas.
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