viernes, 27 de septiembre de 2019

Tu Foto


Una foto tuya bastó para abrir la caja de Pandora que se ha vuelto mi cabeza últimamente. Escaparon batiendo sus largas y pesadas alas los sueños frustrados que compartimos juntos, apoyados sobre la misma almohada. Arrancaron raudos y veloces, dando pequeños y desoladores trancos, las promesas de una vida juntos, una familia feliz, un par de niños y algún can que les acompañase en el largo viaje que es la adolescencia. Sin mirar atrás huyeron en estampida todos los recuerdos de momentos donde las carcajadas eran lo único que lograba retumbar más fuerte que tus latidos, donde tu sonrisa brillaba más que el sol y tus ojos eran las únicas estrellas que veía de noche. Todo por una maldita foto.
           
Bendita foto, la que me trajo recuerdos felices y encantadores de lo que fue un tiempo increíble. Gracias fortuna, por que no existió, en ese tiempo, nadie más feliz que yo mismo. Zozobras hubieron, también lágrimas suficientes para hundir nuestro velero, pero no hay duda que la ame tanto como las estrellas aman a los ojos melancólicos que se pierden en ellas. Te adoré como un ciego al calor del sol, al tacto de la lluvia, al olor de la primavera y al sonido de los pájaros al alba. Te quise como un perro quiere sentir el cariño de su dueño entre las orejas. Te conocí como un libro abierto, el cual leí tantas veces como la vida me lo permitió. Te quería, te quiero y te querré siempre, por que a mi vida diste un color que no conocía.

Hoy te recuerdo cuando hago lo que me gusta, por que lo compartíamos de la mano. Hoy te asomas en mis pensamientos como una espectadora expectante. Hoy te dedico estos párrafos, por que palabras no tengo. Hoy quiero saberte feliz, contenta y alegre. Fuerte, libre, alocada. Hoy deseo que a tu paso solo haya sol y éxito, pura vida. Cuánto más pienso en el ayer, cuando más miro hacia el mañana, me doy cuenta que hoy ya no te espero, hoy ya no te pienso, hoy ya no estás aquí, ni quiero que lo estés: Nuestro tiempo fue furtivo, fugaz y franco, y lo enmarco entre mis memorias, junto a esa maldita, bendita foto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario